Sopla

Hay una alabanza que me gusta mucho  y en mis tiempos de adoración a Dios en mi casa suelo usarla. Y una de las estrofas es una oración pidiendo: Santo Espíritu de Dios, Sopla en mí.  Y considerando que estamos al inicio de una nueva semana, pensaba en lo hermoso que sería que recibiéramos ese soplo de su aliento sobre cada uno de estos siguientes días.  Así que oré por ti, que estás leyendo estas líneas y le pedí al Señor que sople sobre cada uno de tus días  sus maravillas. ¿Qué tal si le pides al Señor que comience soplando sobre ti de su amor y de su paz? Tienes decisiones que tomar, ¿entonces qué tal si le pides que sople sobre ti la capacidad para administrar la sabiduría que solo Él sabe impartir?  ¿Hay conflictos que enfrentar?  Entonces pidámosle que sople la paciencia que necesitas. ¿Nuevos retos? Que sople fe. ¿Gente difícil con quien trabajar? Entonces que sople mansedumbre y templanza. ¿Momentos tristes que pueden llegar? Entonces que envíe el soplo de su gozo.  

Todas y cada una de estas cosas no son nada más ni nada menos que el fruto de su Espíritu.  Solo las encontramos en su presencia y manteniendo una relación con Él. Así que, si hay carencia de alguna de ellas, entonces oro a Dios para que su soplo se lleve todo aquello que no te permite acercarte más a Él.

Todos necesitamos el aliento de vida que Él nos da. Así que comienza tu semana deseando cada día más de Él y menos de ti, para que su plenitud abunde en ti y puedas transmitir a otros de ese mismo aliento que te sostiene y te da vida.

Bendigo tu semana de la manera que el Señor envió a Aarón y a sus hijos a bendecir a los hijos de Israel:

Jehová te bendiga, y te guarde;

²⁵ Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia;

²⁶ Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz.

Porque tú eres Israel, recibe su aliento y su soplo sobre ti hoy.