La receta de la felicidad

Todo el que me conoce y comparte conmigo, sabe que suelo usar mucho la siguiente expresión: “No tengo la receta completa de la felicidad, pero de que lleva café, lleva café”.

La realidad es que todos quisieramos tener una receta o una fórmula mágica para la felicidad. Hoy quiero compartirte la mía. Hace unos años, me encontraba atravesando un momento muy duro en mi vida y, sin darme cuenta, había entrado en una depresión. Lo único que podía ver eran razones para llorar y estar infeliz. Cierto día, en una profunda conversación con una gran amiga (hermana del corazón), ella me confrontó con una realidad que me sacó de donde estaba y me enseñó para el resto de mi vida a no volver a estar triste jamás. Solo utilizó estas sabias palabras: “estás triste porque quieres, porque ser feliz es una decisión”. ¡🥵Boom🥵! Sentí que la cabeza me voló en pedazos. Estaba pasando por un trago tan amargo, ahogada en lágrimas y dolor, desesperanzada y casi con ganas de morir, esperando que mi amiga me trajera consuelo y palabras para alentar mi dolor. Pero, en lugar de pasarme la mano y llorar conmigo, me hizo la confrontación más valiosa de mi vida. Era mi decisión ahogarme en mi dolor, lo cual podía hacer porque tenía mucha razones, o podía reprogramar mi mente y entender que mi felicidad no depende de mis circunstancias, sino de mi actitud y visión para atravesar por las mismas. Soy responsable por lo que decido.

Hoy puedo decirte que jamás he vuelto a estar triste. No quiere decir que no he pasado por situaciones difíciles o dolorosas. Pero en medio de ellas, YO HE DECIDIDO SER FELIZ. Mis circunstancias no me definen ni deciden por mi. Soy feliz porque quiero y sobre esa verdad vivo. Escojo mirar lo mejor cada día en lugar de las razones para estar triste. Escojo por la gratitud, por el gozo, por la paz. YO ESCOJO. Y como me toca escoger, escojo ser feliz.

No sé lo que puedas estar viviendo hoy, puede que tengas todas las razones para estar triste y hasta justificadamente. Pero te invito a que escojas por la felicidad. En el ultimo análisis, la tristeza no te deja nada bueno. En cambio la felicidad si. Reconsidera tus circunstancias y escoge ser feliz, verás que bien se siente y será la mejor decisión que habrás tomado en tu vida. No olvides que en Dios estás completo y lo tienes todo y en su presencia hay plenitud de gozo, déjalo que fluya. Bendiciones.